Más allá de la noche que me cubre
negra como el abismo insondable,
doy gracias a los dioses que pudieran existir
por mi alma invicta.
En las azarosas garras de las circunstancias
nunca me he lamentado ni he pestañeado.
Sometido a los golpes del destino
mi cabeza está ensangrentada, pero erguida.
Más allá de este lugar de cólera y lágrimas
donde yace el Horror de la Sombra,
la amenaza de los años
me encuentra, y me encontrará, sin miedo.
No importa cuán estrecho sea el portal,
cuán cargada de castigos la sentencia,
soy el amo de mi destino:
soy el capitán de mi alma.
Este poema victoriano que sirvió de inspiración y aliento a Nelson Mandela a lo largo de sus 27 años de cautiverio en la prisión de Robben Island, también nos sirve para entender la importancia de buscar la inspiración en el trabajo de otras personas con el firme objetivo de mejorar día a día.
Permitirme repasar algunos de los fragmentos de este poema. Para mi el alma es la esencia de cada uno de nosotros, lo que realmente somos, lo más nuestro y lo que nos define a fuego. Ser agradecido por tu esencia incluso en los momentos más oscuros es un acto de responsabilidad, que es de lo que habla este poema.
Son muchas las “azarosas garras de las circunstancias”, son muchas las situaciones que no elegimos, que se presentan sin haberlas solicitado. No podemos pensar que tenemos poder de elección sobre todas las cosas, pero siempre podremos ser libres de elegir como afrontarlas. No caer en el victimismo, en ser el resultado del azar, en sufrir las consecuencias de la mala suerte y bajar la cabeza. Cuanto tiempo llegamos a perder lamentándonos continuamente por nuestra mala fortuna y encontramos las excusas y justificaciones necesarias para no afrontar las situaciones que aparecen en nuestra vida sin la actitud necesaria para pelear. Muchas veces solo necesitamos “pelear” porque en la pelea descubrimos como luchamos por mantener a salvo e invita nuestra alma, nuestra esencia: “Soy el amo de mi destino, soy el capitán de mi alma”
Este último fragmento me conecta con aquellos que deciden luchar contra sus miedos, frente a enfermedades que se presentan de manera injusta y cruel, pero que hacen que saquen su alma guerrera y luchen por una victoria que, en muchos casos, inspira y transforma.
Buen inicio de semana
Decía W. Churchill «Derrota tras derrota hasta la victoria final». Esta actitud positiva es la necesaria para sentirse «invictus». Como bien dices, no somos dueños de las circunstancias pero sí lo somos de nuestro destino a la hora de afrontarlas. Magnifico post Alvaro. Buen inicio de semana también para ti.
Gracias Álvaro. Buena semana para tí también.
lo mismo para ti alvaro, me ha encantado:)
feliz lunes!
Precioso post Alvaro,me he emocionado…el alma es lo mas nuestro y lo mas poderoso q tenemos.el alma nunca muere!Hay que luchar dia a dia por mantener esa esencia nuestra que nos diferencia de los demas.
Un saludo!
Gran post como siempre Álvaro! 🙂
Abrazo
[…] es la primera vez que desde este blog: (http://alvaromerinojimenez.wordpress.com/2011/12/12/invictus/ ) o desde uno de mis libros he dedicado mi más sincero homenaje a la figura de Nelson Mandela […]